Cómo lavar tu almohada, descubre la forma correcta

Las almohadas son esenciales para conseguir un descanso ideal. Son un complemento que ayuda a nuestra columna y cervicales a relajarse sin perder la alineación con todo el cuerpo y evitar así problemas o dolores durante el descanso. Conscientes de su importancia, es fundamental saber cómo cuidarlas y mantenerlas limpias y desinfectadas. Si quieres descubrir cómo lavar tu almohada, te invitamos a seguir leyendo. ¡Vamos a ello!

 

¿Cuándo tengo que lavar mi almohada?

Empecemos por definir cada cuanto tiempo es recomendable limpiar tu almohada. Si bien es cierto que quizás no es necesario hacerlo de manera tan regular como hacemos, por ejemplo, con las sábanas, sí que debemos ser conscientes que nuestra cabeza está apoyada en ella todas las noches. 

Por este motivo, aconsejamos limpiarla como mínimo una vez al año y siempre después de padecer alguna enfermedad de carácter vírico, ya que en ella se suelen acumular ácaros, bacterias, ...

 

¿Cómo lavar tu almohada? ¿Puedo lavarla en la lavadora?

Depende. No todas las almohadas están compuestas por el mismo tipo de material. Debes tener en cuenta si tu almohada es de fibra, viscoelástica, de látex… 

Según su material te daremos unos consejos o indicaciones, y en caso de duda te recomendamos buscar su etiqueta, dónde estará indicado debidamente su composición así como el procedimiento de lavado. 

 

Cómo lavar almohadas de viscoelástica

Las almohadas de viscoelástica son uno de los tipos más vendidos en la actualidad, gracias a su capacidad de adaptabilidad y efecto memoria que le dan un plus de descanso a diferencia de otras opciones.

En cuanto al lavado, las almohadas viscoelásticas no se pueden lavar directamente. Se debe principalmente a qué con el lavado se pueden perder sus propiedades y quedar estropeada. Solo en casos muy extremos o necesarios, como podrían ser grandes manchas puedes proceder a su lavado. El lavado deberá ser a mano, con agua y jabón suave, y al finalizar aclarar detalladamente y dejar secar al exterior hasta quedar completamente seca. 

Para rehuir de lavar almohadas con este compuesto, recomendamos utilizar fundas dobles con cremallera exterior. Estas sí podrán ser lavadas regularmente en la lavadora.

 

Cómo lavar almohadas de látex

Este tipo de almohada es mejor lavarla a mano o en caso de tener que hacerlo en lavadora elegir el programa más delicado. 

Para lavarla a mano, mezcla agua tibia con detergente líquido, humedece un paño y realiza suaves movimientos circulares sobre las manchas. Una vez limpia, recomendamos que a la hora de secarla, hacerlo al aire libre y a la sombra.

 

Cómo lavar almohadas de plumas

Antes que nada debemos diferenciar entre aquellas almohadas de plumas naturales y aquellas con plumas sintéticas. Las almohadas de plumas naturales es mejor no lavarlas, en cambio, las sintéticas se pueden lavar sin ningún tipo de problema. Para el lavado, debes seguir los siguientes pasos: 

 

  1. Usar detergente para ropa delicada.
  2. Elegir programa para ropa delicada.
  3. Mete un par de pelotas de tenis o de lavado para evitar la pérdida de volumen. 
  4. Programa un ciclo de centrifugado suave.
  5. Déjalas secar al aire libre, sin que le dé el sol. Además, debes remover regularmente para evitar que las plumas se comprimen o se aprieten.

 

Consejos para mantener limpia tu almohada

Cuando compras una almohada, normalmente viene con una funda protectora que puedes lavar regularmente; además vemos conveniente contar con una funda extra que te permita una doble protección. 

Nuestro consejo es que laves la funda junto a las sábanas para conseguir un extra de higiene y protección ante la aparición de manchas y la proliferación de bacterias o ácaros.

Si estás pensando en adquirir una nueva almohada, conoce nuestra amplia gama de almohadas y dale a tu cabeza el apoyo que necesita para lograr un descanso óptimo. 

 

Almohadas amarillentas, qué hacer

¿A la hora de lavar tu almohada has descubierto que está llena de manchas amarillentas? Esto puede ser debido principalmente por dos motivos: 

 

  • Sudor: al dormir aunque a veces no lo notemos, nuestro cuerpo suda para mantener nuestro cuerpo en una temperatura confortable. Poco a poco y aunque la almohada lleve protecciones el sudor se va filtrando ocasionando estas manchas amarillas. 
  • Saliva: como pasa con el sudor frecuentemente todos babeamos en algún momento u otro de la noche sobre todo si dormimos con la boca abierta, la saliva se filtra y mancha la almohada.

 

 

¿Y cómo se pueden limpiar? Aplica sobre las manchas amarillas, vinagre y bicarbonato de sodio. Pon la almohada a remojo con agua tibia y dos tazas de vinagre blanco. Si la mancha no desaparece, opta por una mezcla de bicarbonato de sodio y vinagre blanco y aplícalo directamente sobre la mancha. 

Si con esta mezcla, la mancha sigue sin salir, utiliza productos más agresivos como el amoniaco líquido o la lejía.

Finalmente, para su secado, puedes usar perfectamente la secadora o tenderlos al sol.