Donde dormir a un bebé recién nacido

Una de las cuestiones que más preocupan a los futuros papás tiene que ver con el sueño. Entre otras cuestiones, dónde dormir a un bebe recién nacido es una de los asuntos que más inquietud suscita a los padres.

Donde dormir a un bebé recién nacido

Las opiniones son muy variadas a este respecto. Te sacamos de dudas.

 Lo primero que tienes que saber es que el sueño tiene que ver con cada niño, pero también con los hábitos que van adquiriendo. Dormirlos en un entorno tranquilo y que se sientan seguros es indispensable. Los niños recién nacidos, en cualquier caso, duermen entre 14 y 18 horas al día repartidas en ciclos que oscilan entre la media hora y las tres horas. A medida que el niño va creciendo, este irá acortando las horas de sueño y cambiando sus hábitos.

Cuna vs. moisés

El sitio físico es de suma importancia. Ahora bien, con respecto al lugar físico donde dormir, podrás usar moisés o cuna indistintamente en esta primera etapa. Eso sí, teniendo una serie de precauciones.

  • Que la cuna sea segura y apropiada para el bebé. Como es lógico, en la elección de este elemento tendremos que poner el foco en la seguridad. Para ello tiene que cumplir una serie de requisitos como que la separación de los barrotes nunca sea menos de 6 cm. Además, la altura de estos tendrá que ser como mínimo de 60 cm.
  • El colchón no debe hundirse, para ello este tendrá que ser duro.
  • Que la cuna tenga distintas alturas para el colchón. Esto será de suma utilidad a medida que el bebé vaya creciendo. Así, un bebé recién nacido tendrá el colchón situado lo más arriba posible. El colchón se irá bajando a medida que el bebé vaya creciendo.
  • Si vas a optar por un moisés, entonces te tienes que asegurar de que el pie sea estable. Si puedes elegir un moisés con ruedas, mejor. Esto te facilitará la tarea de moverlo. No puedes olvidar que una de las utilidades de estos elementos es la funcionalidad y la ligereza. Sácale partido, ¿por qué no?

¿Qué hay de la cama colecho?​


Como ya hace sospechar la propia palabra, la cama colecho está pensada para dormir con el bebé. Ahora bien, no se trata de meter al bebé en nuestra cama. Nada más lejos de la realidad. En este caso estamos hablando de una cuna especialmente pensada para ser adosada a la cama.

  1. Colchón Cuna Bebé Elephant Colchón Cuna Bebé Elephant
    Colchón Cuna Bebé Elephant
    Rating:
    0%
    Antes 204,94 € Desde 102,00 €
  2. Colchón Cuna Baby Bear Colchón Cuna Baby Bear
    Colchón Cuna Baby Bear
    Rating:
    0%
    Antes 164,76 € Desde 82,00 €

 Si estás pensado en dormir con el bebé de esta manera, tienes que tener en cuenta que además de comprar una cuna pensada para este fin tendrás que tener las siguientes precauciones:

  • Que el colchón sea firme. Al igual que sucede en el caso de las cunas o de los moisés, se desaconseja la elección de colchones que se puedan hundir por el centro.
  • La ropa de cama de la cama colecho no tiene que ser pesada. Todo lo contrario: tendrá que ser ligera.


Qué es y como funcionan las cunas colecho

Como ya te hemos avanzado, las cunas colecho son unos elementos pensados para ser adheridos a la cama de los padres. Respecto del funcionamiento este no puede ser más sencillo. Las cunas de este tipo en realidad son mini cunas donde unos de los lados están pensados para ser acoplados. Solo hay que deslizar hacia abajo este lado hasta acoplar la cuna con la cama.

¿Cuáles son los beneficios y las precauciones de este tipo de cunas?

Entre los beneficios más destacados está la facilidad de la lactancia materna y la comodidad con respecto al descanso. Los bebés, está demostrado, que se sienten más seguros y tranquilos con los padres cerca, así como que también incide positivamente en la tranquilidad de los padres. Eso sí, la práctica del colecho implica tener una serie de precauciones:

  • Se desaconseja el tabaquismo, el consumo del alcohol, de drogas y de sedantes durante la práctica del colecho.
  • No hacer colecho cuando se está excesivamente cansado.
  • Se desaconseja con bebés prematuros o demasiado pequeños durante al menos los primeros meses.
  • No es aconsejable que las mascotas formen parte del colecho.

La habitación del bebé tiene que ser tranquila y adecuada

En el caso de que no vayas a practicar el colecho y que vayas a acostar al bebé en su propia habitación, también debes tener en cuenta una serie de recomendaciones.

Uno de los consejos universales relacionados con donde debe dormir un bebé es que la estancia, sea cual sea la opción que elijas a la hora de dormir sea tranquila y adecuada. Esto es especialmente relevante cuando el bebé va a dormir solo en su habitación desde el primer día.

Tienes que contar con un dispositivo que te permita oír y ver al bebé desde la estancia en la que te encuentres.

La habitación debe estar bien ventilada.

Pon una mecedora o un sillón cómodo para la lactancia o para dormir al bebé. Nos agradecerás este consejo.

La ropa de cama y los accesorios

Como ya te hemos advertido, la ropa de cama debe ser ligera y nada pesada. Esto no está reñido con el confort. Además, nada de almohadas y de peluches en la cuna del bebé. Estos elementos pueden provocar graves accidentes. La seguridad se extiende a la ropa de cama. Procura que sea ropa elástica que no se pueda soltar y en la que el bebé no se pueda enredar.

El ambiente propicio para el sueño

  • Ocúpate de crear un ambiente relajado y tranquilo antes de acostar a tu bebé.
  • Pon atención a la temperatura de la habitación. Que no haga frío, pero que tampoco experimente demasiado calor.
  • No abrigues en exceso al bebé.
  • Asegúrate de acostar a tu recién nacido boca arriba.
  • Establece una rutina de sueño siguiendo horarios regulares.

Donde dormir a un bebé recién nacido es un asunto de envergadura, para el que los consejos conforman una lista infinita. El uso de ruidos denominados como blancos o la conocida técnica de la envoltura son otros trucos para ayudar al bebé a dormir, como implementar horarios en las siestas para evitar que sean cortas o que el bebé se despierte numerosas veces durante la noche. En cualquiera de los casos, armarse de paciencia y amor es la mejor manera de afrontar las vicisitudes del sueño de un bebé.