¿Qué almohada viscoelástica comprar?

La almohada, así como el colchón, son piezas fundamentales que afectan directamente a nuestro descanso. Por este motivo, a la hora de elegirlos, debemos prestar atención a nuestros propios hábitos y necesidades. Si nos hemos decantado por una almohada viscoelástica, ¿sabemos cuál comprar?

¿Qué es una almohada de viscoelástica?

Una almohada viscoelástica, como su nombre indica, es aquella que está compuesta por dicho material. Se trata de una espuma muy suave pero que tiene la capacidad de absorber impactos. Reduce también las presiones sobre el cuerpo ya que logra hacer una distribución equitativa del peso.

Este material fue creado por la propia NASA para los astronautas. Por sus características, conseguía paliar la presión durante los despegues. Debido a su comodidad y a sus propiedades beneficiosas, hoy en día se utiliza en la creación de colchones y almohadas.

Desde su aparición, la almohada viscoelástica ha transformado por completo el mundo del descanso. Aunque existen diferentes modelos adaptados a la postura corporal de cada persona durante el sueño, la almohada viscoelástica más popular es la cervical. Su forma curva permite la alineación del cuello con la columna, aliviando la presión y favoreciendo el descanso. Este modelo se recomienda para quienes duermen de lado o bocarriba.

Para aquellas personas que prefieren dormir bocabajo, la almohada viscoelástica que mejor se adapta a ellas es la que tiene la forma tradicional. Puesto que no es una postura recomendable, debe ser suave y blanda, para mejorar en lo posible la alineación vertebral.

¿Qué es mejor: almohada de látex o viscoelástica?

Si no tenemos claro si debemos decantarnos por una almohada viscoelástica o una de látex, conviene conocer las propiedades y características de cada una de ellas. En cualquier caso, lo más recomendable es tumbarnos sobre ambas y comparar las sensaciones experimentadas.

Tanto la almohada viscoelástica como la de látex están fabricadas con rellenos sintéticos. Esto hace que su durabilidad sea mayor y que su firmeza se mantenga durante más tiempo. Las almohadas de algodón tradicionales que se han venido utilizando se caracterizaban por la pérdida temprana de su forma. Con las almohadas sintéticas, esta desventaja ha quedado atrás.

Las almohadas de látex poseen una textura suave y muy agradable al tacto. Por desgracia, no permiten mucha transpiración, lo que puede provocar una sensación de calor y retención de la humedad.

En cuanto a la almohada viscoelástica, su principal ventaja es su adaptación a la forma de la cabeza. La calidad de la viscoelástica Dormity permite una combinación de factores que la hacen ideal:

  • Mantiene la cabeza en una postura estudiadamente estable, con lo que la espalda, el cuello y la cabeza, permanecen en reposo con una postura natural y adecuada.
  • No ofrecen resistencia contra la cabeza: esto pasa con algunos modelos viscoelásticos de peor calidad, ya que recupera con demasiada fuerza la forma, forzando la postura del cuello e incurriendo en problemas de cervicales. Las almohadas de visco Dormity están pensadas para ofrecer la resistencia equilibrada a la recuperación de la forma.
  • No dan calor: Disponen de una alta porosidad para facilitar la transpiración y la termorregulación. Incluso, existen modelos como el Tech, que están tratados con Outlast para retener el calor y ofrecer una sensación de frescor ideal para el verano.

 ¿Cómo limpiar una almohada de viscoelástica?

Para limpiar una almohada viscoelástica, lo primero que debemos tener en cuenta es su tipo. ¿Por qué es esto importante? Pues porque aquellas con forma moldeada no pueden introducirse en la lavadora. Una solución cómoda y frecuente pero que no es compatible con cualquier producto y/o material. En cualquier caso, conviene echar un vistazo a la etiqueta y seguir las indicaciones.

Si nuestra almohada viscoelástica es moldeada, habrá que lavarla mano para que no pierda sus propiedades. En un recipiente con agua tibia, o en la propia bañera, añadiremos un detergente que sea suave o un jabón neutro.

Para la eliminación de posibles manchas incrustadas, nos ayudaremos de un paño limpio. Lo humedecemos en el agua con jabón y, tras escurrirlo, realizamos movimientos circulares sobre la almohada viscoelástica.

¿Cómo secar una almohada de viscoelástica?

Para secar una almohada viscoelástica hay que utilizar toallas que estén limpias. A continuación la dejaremos sobre alguna superficie que se plana y que permita que se seque por ambos lados; así evitaremos que coja olor a humedad. Se recomienda también colocarla en alguna zona que seca y no húmeda.

En el caso de disponer de una aspiradora que tenga un cepillo de cerdas suaves, podemos emplearla con mucha suavidad para no dañar el material. Conviene consultar las instrucciones de la etiqueta antes de proceder y utilizar fundas protectoras para mantenerlas más limpias.

Comprar una almohada viscoelástica es una decisión de la que no te arrepentirás. Una vez que hayas experimentado la sensación de confort y el descanso que te ofrecen, no podrás volver a las almohadas convencionales.